Ocurre que padres y niños dejen de llevarse bien.
Los adolescentes:
- piensan que los padres sólo se interesan por cómo les va en la escuela, que pasan de cómo les va la vida
- piensan que nadie les tiene verdadera consideración
- piensan que los padres se pasan el tiempo regañando, que nunca están contentos
- querrían que los padres sintieran verdadero interés.
Los padres no entienden
- por qué su adolescente no les cuenta nada, o por qué de pronto no hay quien lo pare
- por qué cualquier cosita que se le diga puede ponerle fuera de sí
- por qué contesta a gritos; los padres sienten que se les ha perdido el respeto
- por qué el adolescente no habla y se retrae.